Capítulo 44 '' San Valentine's Day '' (Segunda Temporada)

Chicas! ¿Pero que os pasa? ¿Por qué no comentáis? No estoy recibiendo vuestro apoyo como antes. ¡Tenéis que comentarme eh! Ya sé que hay capítulos que aburren pero a mí me haría ilusión ver comentarios vuestros como antes. De todos modos muchas gracias a las que me comentan. Muchas gracias. XX
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(Narra Evie) (14 de febrero)

14 de febrero. Para mí como otro día cualquiera, para las demás uno de los mejores días del año. Teníamos una semana de vacaciones antes de empezar a grabar el resto del disco y la publicación de el videoclip de ‘’ Say Yeah’’.

  Fly y Zayn se habían ido unos días a pasarlos con la familia de la chica en su ciudad natal. Hoy me apuesto a que el chico le tendría preparado algo especial. Louis y Rebeca habían estado justos casi todos los días y éste aprovechó el viaje que le habían regalado Harry y Taylor por un cumpleaños para irse con ella a París. Él decía que solo era un viaje de amigos pero apuesto a que cuando vuelvan ya son algo más que eso. Ally y Niall se habían ido unos días a la hermosa tierra de Irlanda a visitar a los padres del chico. Laia y Liam estaban por Londres pero hoy habían aprovechado que ambos tenían ganas para viajar a la tierra de Liam. Wolverhampton.  En definitiva que tenía cinco casas para mí sola para pasar el día.

Sí, sé que os estaréis preguntando qué pasa con Harry y conmigo. Pues vamos genial. Es una relación bastante relajada por parte de los dos. A penas llevamos dos semanas pero las cosas ya se han puesto intensas en varias ocasiones. Aún así siempre acabábamos nuestras discusiones muy bien. Nos complementábamos bastante bien en ese sentido. Hoy, mi novio se había ido a Holmes Chapel a visitar a su  familia puesto que le había dicho que no quería nada por San Valentín. Nunca me ha gustado esta fecha. Me parecía una manera muy idiota de malgastar el dinero, como cualquier otra festividad. El amor se demuestra todos los días y no un día en concreto. Por todo eso hoy estaba solita si nada que hacer. Mi plan para hoy era ir a hacer la compra, alquilar alguna peli y pasarme en casa todo el día. Para mi desgracia me había dado uno de esos madrugones que no apetecían hacer en un día libre en el cual no tienes nada interesante que hacer.

Me vestí perezosamente. Cogí lo primero que vi. Sudadera violeta, leggins vaqueros y unos All Star negros. Me peiné un poco  el pelo y me puse mi gorro de lana gris. Mi favorito por el cual Rebeca no paraba de llamarme hipster. Salí de casa con cascos y móvil conectados. Pronto llegué al super e hice una buena compra. Llamé a un taxi mientras estaba pagando. Nadie a penas me reconoció por lo que tuve facilidad. Llegué a casa cerca de las doce. Perfecta hora para empezar a hacerse la comida. Estaba abriendo un paquete de patatas cuando alguien llamó a mi puerta. Con el paquete en mano fui a abrir la puerta. Un ramo de flores apreció delante de mí. Puse mi típica cara rara mientras intentaba tragar las patatas que aún tenía  la boca. Miré a mí alrededor pero no había nadie. Cogí el ramo y cerré la puerta. Miré si llevaba tarjeta pero no llevaba. Las dejé encima de la mesa y continué comiendo. Volvió a sonar la puerta. Volví a ir a abrir. Otro ramo de flores sin nadie más. Miré a los alrededores pero no había nadie. Puse el ramo al lado del otro y volvió a sonar la puerta. Fui corriendo a abrir pero otro ramo flores a parecía.  No pode evitar mosquearme un poco. Esa vez fui más lista. En vez de alejarme de la puerta me quedé a mirar por al virilla. Y ahí lo vi. Con sus perfectos rizos. Se suponía que no debería estar aquí pero ahí estaba, dejándome flores en la puerta. Antes de que me volviera a timbrar abrí la puerta.

-¿Qué se supone que estás haciendo?- le pregunté poniendo los brazos en jarras y evitando la sonrisa que me estaba por salir. Él me sonrió.

-Era obvio que no íbamos a pasar San Valentín separados a pesar de que no te guste- me dijo acercándose para darme un beso. Lo acepté de buena gana.

-¿Y este secretito de las flores?

-Ah, es que me hacía ilusión ver cuánto aguantabas así. Tu cara conforme ibas  abriendo la puerta fue épica- empezó a reírse y yo le pegué una colleja pequeña.-Bueno, coge las llaves de tu casa que te voy a llevar a un sitio- se hizo el misterioso. Sabía que lo que buscaba era que le preguntara a donde así que no lo hice.

-Vale, ¿me tengo que arreglar?

-No, estás genial siendo tú misma. Me encanta que lleves sudaderas.

-Ay, que me voy a sonrojar- hice la sarcástica provocando que se riera.

Cogí las llaves de casa y cerré la puerta. Entramos en su coche y encendió  la radio una vez puestos en camino. Tardamos bastante en llegar y una vez que estacionó el che comprendí a donde me quería llevar.

-Harry, ¿qué hacemos en Holmes Chapel?- le pregunté temerosa de la respuesta.

-Te voy a presentar a mi hermana y a mi madre.

(Narra Rebeca)

En mi mente tenía como grabado que solo era un viaje de amigos pero no podía evitar pensar que ambos los dos estábamos en la ciudad de amor el día del amor y que me había elegido a mí para que lo acompañase. Hoy teníamos planeado ir a dar una vuelta por los alrededores de la Torre Eiffel pero antes subiríamos a ella.

Esperé a Louis en recepción y en pocos minutos apareció lo más cubierto posible. Recorrimos París andando aunque teníamos que andar poco. Nuestro hotel quedaba cerca de la Torre Eiffel.

Esperamos la típica cola que no llevaba al ascensor. Teníamos que aguantar que algunas personas nos miraran raro pero probablemente era porque Louis podía estar siendo descubierto.

Subimos a la planta más alta donde se veía mejor todo París. Era increíble. Yo eché un euro en un telescopio y estuve observando el increíble panorama pero eso sí dejándole a Louis que observara e también. Estábamos parados frente a la barandilla mientras observábamos el paisaje cuando en un momento dado comenzamos a hablar sobre nuestros sentimientos.

-Bec, hace tiempo que quiero decirte una cosa pero no sé cómo me vas a contestar. Si te soy sincero es la primera vez que tengo miedo de decir lo que siento.

-Dilo. Te quedarás más tranquilo y ya sabes que a mí puedes contarme lo que tú quieras.

-Te quiero- soltó de repente. Salté de sorpresa.

-¿Cómo me quieres?

-Te quiero. Lo llevo haciendo desde que te conocí pero realmente me di cuenta de ello el día que te besé. ¿Te acuerdas? En el concurso cuando me dijiste que no querías vernos más.

-Como no me voy a acordar...

-Pues Bec yo te llevo queriendo desde entonces… Lo que te dije en el avión era cierto… No quería a Eleanor te quería a ti.

-Yo… Yo también te quiero, Lou…

-¿Enserio?- se le iluminó la cara con eso. ¿Cómo no iba a quererlo? Si era perfecto.

-Enserio…

Se fue acercando a mí  y ocurrió. Sus labios se posaron sobre los míos causando una sensación inmensa de felicidad. No podía creerme que esto estuviera pasando. Se separó de mí lentamente.

-Te quiero… Muchísimo. ¿Quieres ser la señora de Tomlinson?

-¿No crees que vas muy rápido Tommo?- pregunté acercándome a él.

-No, quiero que seas mía para siempre.

-Pues entonces, tuya seré para siempre y mío tú serás.

-Tuyo por siempre jamás- nos besamos como deseábamos hacer ya desde hace mucho tiempo pro el beso fue interrumpido por nuestras risas.

-No sabía que fueras tan romántico Lou- m reí de él.

-Pues anda que tú… Mío tú serás… Suena a parte de alguna canción ¿eh?

Me acerqué a él aun riendo y nos volvimos a besar.