(Narra Rebeca)
Después de que lo que había pasado con la llamada estaba aún
más nerviosa y algo triste porque Louis no contestara a los que le había dicho
Harry.
Entramos en el plató fingiendo unas sonrisas que no éramos
capaces de mostrar con naturalidad. Sandra y nosotras nos agarramos de la mano
y esperamos a que Alexia hablara.
-Bueno, llegó el momento. La persona o personas que han
obtenido el 35% de los votos y pasan a ser el tercer finalista es o son …
Sentí como el corazón se me desbocaba y la respiración iba a
un ritmo muy rápido. Agarré mas fuerte la mano de Evie y cerré los ojos
esperando escuchar nuestro nombre.
-Dreamer Girls- gritó Alexia.
No lo pudimos evitar y saltamos, saltamos mucho de alegría.
Gritamos reímos hasta Evie lloró de emoción. Estábamos echas un manojo de
emociones. Cuando conseguimos calmarnos abrazamos fuertemente a Sandra que no
pudo evitar contener las lágrimas.
-No llores, linda. Muchísimas oportunidades te esperan
fuera, ya lo verás- le animó Alexia mientras que los jueces se levantaban para
venir a abrazarla. – Chicas, tenéis la palabra antes de pasarle el micro a
Sandra- nos dijo Alexia.
-Bueno, queríamos agradecer todo esto a nuestros seguidores.
De verdad muchísmas gracias por confiar en nosotras- empezó diciendo Laia.
-Gracias por votarnos y seguirnos. Gracias por apoyarnos en
todo momento. Nunca me imaginé que llegaríamos a la final. Enserio, sois los
mejores fans que podemos tener, dreamers- dijo Ally después.
-Y solo quería decir también que hoy se marcha de aquí una
maravillosa persona con la que hemos congeniado todas. Sandra las chicas de Dreamer
Girls te desean mucha suerte– dijo entonces Evie. Sandra se zafó de los jueces
y corrió a abrazarnos.
-Un día de estos quedamos ¿vale?- le susurré a Sandra que no
paraba de llorar. Ella asintió con la cabeza y las demás le cedimos el
micrófono y el escenario.
Estábamos contentas pero a la vez un poco tristes. Nunca
habíamos pensado que llegaríamos tan lejos y ahora estábamos viviendo como un
sueño. No quería despertarme ni de broma.
…
Última semana del concurso. Última semana que pasaría en
Madrid. Última semana en la que viviré en ese gran hotel con mis cuatro mejores
amigas. Muchas cosas habían sucedido desde que habíamos comenzado pero a pesar
de ello siempre nos habíamos mantenido unidas. No sabía como iba a hacer para
estar sin ellas.
La oferta de la discográfica seguía en pie pero no éramos
capaces de pensar sobre eso aunque ya hubiésemos aceptado al oferta. Evie ya
había hablado con sus padres y con un poco de insistencia aceptaron por lo que
ahora sus padres le estaban arreglando todos sus papeles. Los padres de Ally,
nos estaban ayudando a encontrar una casa en Londres perfecta para nosostras.
Ally cumpliría los dieciocho dentro de dos semanas por lo que ya podía irse a
vivir sola. Las demás ya éramos mayores de edad, exceptuando Evelyn pero como
tenía permiso de sus padres, ahora nosostras teníamos que hacernos cargo de
ella. Pero no nos importaba nada.
-Rebeca, despierta- me gritó Fly mientras se me tiraba
encima. - ¿Por qué estás tan pensativa hoy?
Fly y yo habíamos salido a tomar algo a un Starbucks
mientras que las demás se habían quedado en el hotel discutiendo por nuestra
última actuación.
-Lo siento. Solo estaba meditando todo lo que nos ha pasado
desde que hemos comenzado esta aventura.
-Aun no me creo que nos mudemos a Londres- me soltó Fly toda
emocionada.
-¿Lo dices por Zayn o por esa maravillosa ciudad?- le
pregunté irónicamente ya que era obvio que lo decía más por Zayn.
-Por las dos cosas- dijo sonriendo.
-Ya, claro- reí.- ¿Qué tal te va con él?
-Muy bien. Nos llamamos todos los días y aun que no venga
para la final estoy feliz porque viviremos en la misma ciudad- me contestó
ilusionada.
Yo también lo estaba porque estaría más cerca de Louis pero
no sería lo mismo. No dejaríamos nunca de ser amigos y aun que no quisiera
aceptarlo eso me fastidiaba mucho.
-Tu nada nuevo con Louis ¿no?- me preguntó con una mirada
triste. Ella era la persona que más había tenido que aguantar mis berrinches de
noche.
-Nada de nada. Me alegro de ir a vivir a Londres pero no sé
si podré soportar tenerlo tan cerca.
-No digas tonterías. Londres es enorme. No tienes por que
verlo si no quieres.
-Lo dices en broma ¿no? – me miró sin entender.- Voy a tener
que verlo quiera o no. Vosotras estáis relacionadas con los chicos.
-Creí que te gustaba estar con ellos.
-Y me gusta. Me divierto mucho pero si tengo que verlo a él
cambia un poco las cosas. No dejaré de llevarme con ellos y ahora que viviremos
juntas los veré a menudo pero estar un poco alejada de Louis no me vendría mal
para aclarar las ideas.
- Bec, ya estás ahora mismo alejada de Louis y no te lo das
sacado de la cabeza- Fly había dado en el clavo.
-Es cuestión de tiempo- contesté pero eso no me lo creía.
-Eso no te lo crees ni tú- me dijo mientras me daba una
palmada en la espalda. – Anda deja de pensar tanto y sé la Rebeca de siempre.
La loca que nunca piensa las cosas.
-¡Yo no estoy loca!- grité apróposito. La gente nos miró
raro. – Un poco, puede- dije bajando el tono. Al final acabamos la tarde con
muchas muchas risas.
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